La pesca de la lucioperca al contrario de los que algunos piensan es sumamente técnica y
siempre pone a prueba "las tablas" del pescador, es un tipo de pesca
en la que enseguida salen a relucir los defectos o virtudes de cada uno, siendo un pez sumamente desconfiado
con una picada sutil que apenas te da unas décimas de segundo para clavar.
La
ligereza del equipo, el diámetro de línea son factores importantes en esta pesca, igualmente que la sensibilidad de la caña, mucho más importante que el carrete
que en este caso no hace falta que sea de una gran calidad.
Siempre
que su pesca se practique en profundidades importantes pongamos a partir de
7-8m yo soy partidario de utilizar líneas trenzadas de diámetros muy finos
0,12mm-014mm con estos diámetros con paciencia, pericia y por supuesto suerte
podemos enfrentarnos a la eventual captura de un siluro, no es la primera vez
que hemos conseguido hacer posar para la foto siluros de 2M con estos equipos,
si bien se ha de tener mucha suerte y hacer las cosas muy bien para llevar el
combate hasta el final.
El uso de
un bajo de fluorocarbono es fundamental por dos razones, una de ellas la nula
visibilidad en el agua y otra no menos importante la resistencia al roce y la
abrasión de este tipo de líneas, tenemos que tener en cuenta que nuestro
señuelo va a estar casi todo el tiempo en contacto con el fondo por lo que la
línea va a rozar con todo tipo de obstáculos, rocas, ramas y en aguas de Mequinenza también el
cortante mejillón cebra.
Como con
todos los peces que suelen ir en grupo la localización siempre es importante
habiendo zonas prácticamente estériles para este pez y otras que son verdaderos
"imanes" que año tras año son visitados por las vampiras, como yo a
veces digo a pescadores que me visitan yo no puedo enseñar a pescar a nadie en
una jornada de pesca, puedo aconsejar y explicar el porque de mis argumentos,
pero es el tiempo, las experiencias y los años los que más enseñan, si bien en
infinidad de ocasiones abren los ojos y ven lo equivocados que estaban, sacando
más conclusiones en una jornada de pesca guiada que en años pescando por libre.
Mal
camino lleva el que confíe más en la suerte que en el encontrar las respuestas del donde, como
y por que, esto de la pesca es como escalar una gran montaña a la que no se
puede llegar en poco tiempo y requiere años, experiencias, aprendizaje y si
puede ser alguien que te abra los ojos y te aconseje "bien".
Pero como
una imagen valen más que mil palabras, os dejo con algunas capturas fruto de la
experiencia acumulada durante muchos años, de conocer bien el terreno y de ese % de suerte que siempre
ayuda...
GRANDES LUCIOPERCAS DE MEQUINENZA