Poco a
poco el agua va ganando temperatura y las luciopercas se preparan como cada año
para la freza buscando esos lugares que tanto les gusta, playas de guijarro,
entrada y caída de las reculas, entradas de agua al embalse, etc...
Por ello,
elegir bien los lugares que vamos a pescar, un buen manejo de la sonda, unos
señuelos que pesquen y tener confianza en lo que se hace son las bases en esta
pesca, de nada sirve pescar en lugares donde no hay peces, por ello es
fundamental conocer la orografía del embalse, el tipo de fondo y las zonas que
casi cada año este pez escoje para frezar, si hacemos bien las cosas y hay
luciopercas en la zona que estamos pescando los resultados no llegaran en
llegar pudiendo hacer más de un doblete.
La pesca de la lucioperca es una pesca técnica donde no se permiten las
"chapuzas", pescar un par de luciopercas está al alcance casi de
cualquiera, hacerse con una veintena de ellas de buen tamaño solo al de unos
pocos, todo tiene su momento y su día, cambiando y variando durante la jornada
hasta dar con la tecla, tamaño de los señuelos, colores, profundidades, etc..
aunque suele haber colores como los chartreausse y perla que casi nunca suelen
fallar, vinilos en 2", 3" o máximo 4" y si todo falla siempre se
puede recurrir a los kopytos de RELAX que esos si que no fallan nunca!!!
Son estos
meses cuando más accesibles se encuentran para el pescador, pero también cuando
el captura y suelta es más importante y más debemos de concienciarnos de que
los peces de hoy son el futuro del mañana.
Os dejo
con unas fotografías de una jornada de pesca que hablan por si solas de lo que
es cantidad y lo más complicado, calidad.