Esta vez
quisimos pescar siluros con pellets, aunque en nada se parece a la pesca al
lance las circunstancias hacen que en estos meses de calor y con un río Ebro
bajo mínimos esta pesca sea más productiva y puedan obtenerse mejores
resultados.
En el
lugar pillábamos algo más de 5 metros de agua, algo bastante complicado en est
zona del río-embalse en estos momentos y estaba claro que siluros había y sólo
había que esperar su momento de actividad, al poco de llegar al puesto un par
de siluros nos dieron la bienvenida mostrándose alrededor de la zona cebada.
Aunque
tardaron en dar la cara al final la dieron con varias picadas, uno de ellos muy
grande partió la línea después de varios minutos, 4 siluros y una carpa salieron del agua, con el más grande
de ellos de 2,07m.