Si hay un
culpable de que el río Ebro sea el río Europeo más famoso a nivel de pesca, es
sin duda la especie silurus glanis y la cantidad y calidad de esta especie que
se da en este río. Hay otros ríos europeos como el Rhone o Saone en Francia o
el Po italiano en los que también se pescan grandes siluros, pero no la
cantidad que en el Ebro.
Estas
fechas primaverales son las más adecuadas para pescarlos con esta modalidad
habiendo más de un día con la captura de varios grandes ejemplares que superan
los 2M, donde los pescadores que prueban esta modalidad quedan realmente
enganchados, combates agónicos donde te enfrentas a peces más pesados que el
propio pescador en una lucha de poder a poder.