Son bastantes los pescadores que se acercan con sus hijos a orillas del embalse de Mequinenza a pasar el día y probar fortuna con estos peces y que consiguen hacerse la foto o fotos de rigor, no hay nada más gratificante que ver la expresión en la cara de un niño durante la pelea con uno de estos peces y sobre todo después de haber cumplido su sueño de echar su primer siluro a tierra.
Es muy importante educarlos desde pequeños a tratar el pez lo mejor posible y a concienciarlos de lo importante del captura y suelta, viendo al pez como un "amigo" que nos ha deparado unos minutos de pelea y satisfacción que debe ser tratado con el mayor respeto.
Os muestro algunos de ellos que ya han probado lo que es medirse con siluros y carpas del Ebro.
NIÑOS CON SILUROS Y CARPAS DEL RÍO EBRO