Los siluros y las carpas del Ebro hacen las delicias de pequeños y mayores y cada
vez son más los pescadores que quedan enganchados a este tipo de pesca extrema,
peces de estos tamaños fuera del Ebro no son nada fáciles de capturar y aunque
hay otros escenarios fuera de España que también cuentan con grandes siluros
como el Rhone francés o el Po italiano no alcanzan la densidad de población que
se dan en las aguas del río Ebro y sus embalses de Ribarroja y Mequinenza.
Ya han
pasado quizás los meses más calurosos y difíciles y llegamos a unos meses
Septiembre y Octubre que habitualmente suelen deparar grandes capturas. El
embalse se encuentra a un 85% de su capacidad, algo atípico en estas fechas, el
año pasado en estas mismas fechas el embalse se encontraba a poco más de un 30%
y este otoño promete en cuanto a la pesca de grandes capturas, el año
pasado sin ir más lejos los 3 mayores siluros del año salieron en este mes de
Septiembre.
Pellets o
lance, ambas modalidades son válidas dependiendo de las condiciones que se den
y sobre todo al caudal del Ebro, más que el mes en sí, son las condiciones que
suelen darse en esos meses las que marcan la modalidad más efectiva.