Sin duda
la pesca de siluros a pellets siguiendo una especie de parámetros y sabiendo a
lo que pescas es casi un seguro de vida con el que sabes que los resultados van
a llegar prácticamente asegurando picadas y siluros que al fin y al cabo es de
lo que se trata.
Conociendo
al gran depredador que es parece hasta mentira que puedan asimilar como comida
este pienso, un cebo que en un principio iba destinado a la carpa se ha
convertido en el cebo estrella para los grandes siluros del Ebro, especialmente
en los meses más calurosos y cuando la temperatura del agua es mayor.
Ante todo
el siluro es un pez oportunista que no desprecia ninguna oportunidad de aportar
proteínas a sus voluminosos cuerpos y los pellets al fin y al cabo son pienso
de engorde de piscifactoría, lo que supone proteína pura para ellos.
